Introducción

Hola, soy bell, Algunos cercanos me conocen como Invasora bell's en el blog de invasora Aurora. Bueno este libro inicialmente lo escribí para invasora Aurora, en su... cómo lo llaman ustedes?... ah sí cumpleaños, quería parecer humana y hacer algo parecido, bueno, de hecho le dí la primera parte, ya que no alcancé a terminarlo.

Inasora Aurora:
Así es >.<, fue el mejor regalo, aunque me dejaste con la duda ¬¬... burno. ¿burno? mmm... BUENO! eso era xD. espero que les guste esta historia tanto como a mi ^^

Invasora Bell's:
em... creo que les gustará pequeños e insignificantes humanos, y si no les gusta, pues NO LO LEAN!, todos las malas opiniones *piensa qué les hará* sí así era, serán ELIMINADOS!, PULVERIZADOS, por LOS MAS ALTOS!! muajaja bueno pequeños humanos.

Invasora Aurora:
Tiene mucha razón O.Ó, pero aparte de eso, las opiniones serán bien recibidos con abrazos y aplausos! >U< xD

Invasora Bell's:
sí, con muchos golpes si es algo negativo, bueno no piensen que soy ENOJONA, es que solamente me ENOJO con FACILIDAD ^^ iré a comer wafles, Adiós! y disfruten la historia asquerosos humanos.

martes, 23 de marzo de 2010

2do Capítulo

Camarilla, aquí voy
Yo pensé que sería Francia, o algo así, otra bobada mía – “Antes estaban en Francia pero deben cambiar de vez en cuando de lugar”, bien no dije una súper bobada – bueno, no perdamos más el tiempo, entre antes nos cacemos mejor – “concuerdo, vamos, pero ahora tendremos que caminar, si alguien nos ve estaríamos en apuros”, que flojera – bueno vamos – caminábamos de la mano y llegamos a unos edificios, no estaban en uso, parecían como incendiados “Típico” - ¿Qué cosa?, ellos deciden cual edificio tomarán y algo le hacen, para desalojar a la gente, últimamente su favorita ha sido los incendios, aprovechaban algunas presas, ellos, se llevan con los humanos, pero no te metas con ellos si eres humano y tiene hambre – ríe - ¿Quién anda ahí? – se escucha una voz demasiado sumisa, y no olía ni una pisca de sangre, y no creo que alguien de la camarilla sea tan sumisa “Qué raro no es ni Isabel ni Anastasia, ¿Podrá ser una nueva integrante? Siempre parten así de sumisos” – Soy Adrian Gutiérrez, y a mi lado está mi novia Elizabeth Golant Jackson, queremos hablar con la camarilla, si no fuese mucha la molestia – síganme – “Odio que me tengan de guardia más encima me encuentro con un impuro, la muchacha es rara, no me gusta, tiene demasiado poder” gracias, creo que no merecía eso, y si tengo tanto poder ¿Qué tiene? – Disculpa, ¿No eran sólo cinco integrantes? – ahora somos seis ¿Algún problema? – su tono sumiso desapareció al instante, genial, ahora le caigo mal a una de la camarilla, ahora que haré, lancé una carcajada burlesca, dulce sarcasmo, bajamos las escaleras, era un cuarto oscuro, pero podía ver, beneficios de ser vampira, pero se prende la luz, me sorprendió que el edificio tuviese luz con el estado que estaba, Isabel de verdad es aterradora, “Que querrán” dice Isabel – Mi querida Elizabeth, ¿Cómo has estado? – despertando, para ser franca a mis dieciocho he estado siendo vampira sólo diez años – “Que habla” escucho - ah ya me acuerdo, marcela me contó, que pena, pero ahora ya no sigues siendo humana, ¿Cierto? – si fuese humana ¿Crees que estaría aquí? – para ser franco no, y a qué se debe esta visita – haciendo un punto aparte tengo un nuevo don, aparte de los otros - ¿Enserio? ¿Cuál? – puedo meterme en sus mentes, de hecho aún no sé cómo no escucharlos – río – pero en este poder, si tienes algún recuerdo que me quieras mostrar, basta con que me des tu mano – tu si eres genial, seis dones – “Maldita, odio que acapare toda la atención, y sí, sé que me estás escuchando, y te lo digo ahora, te odio” - ¿Isabel? ¿Por qué? – “Por tu tío y no digas nada al respecto sólo cállate” – bueno – simplemente fascinante, ¿Me dejas tratar de copiar alguno de tus poderes? – bueno – me empieza a mirar fijamente, no sentí nada – ah… algún día podré, pequeña aún no me dices el motivo de tu hermosa visita – bueno quiero iniciar con saludarlos, por lo que veo ya me conocen, a mi me han hablado de ustedes, sobre todo de Arturo, Anastasia e Isabel, bueno Adrian, quién estuvo a cargo de mi cuidado mientras era humana, se ha enamorado de mí, y yo de él – y Adrian es un Impuro – dice la sexta integrante – tranquila Victoria – dice Maahi – prosigue mi dulzura – dice Arturo – sé que para ustedes es inconcebible, pero me quiero casar con Adrian, no sé como lo harán si por votación o por un no al unísono – ¡votación! – anuncia Maahi y Arturo al unísono – ¿Isabel? – pregunta Maahi – no – responde “No puedo dejar que alguien que Joseph ama sea feliz” – ¿Tomás? – sí, ya son nuevos tiempos, no nos tenemos que ligar a las razas – ¿Arturo? – por supuesto ¡Que viva la feliz pareja! - ¿Anastasia? – claro, por qué no – y ¿¡por qué si!? - chilla Isabel, se iba a acercar para atacarme, con mi mente la azoté contra la pared, y la dejé ahí con unas tuberías la dejé amarrada – asombroso – dice maahi – lo siento Isabel, yo lo amo, y no dejaré que porque odies a mi tío no me dejes ser feliz – te odio, eres una cabra chica que nunca sabrá amar – hice caso omiso a lo que dijo – continuemos con las votaciones – dije – suéltame - ¿Para que me ataques de nuevo?, no gracias - ¿Victoria? – lo siento, por haberme comportado como lo acabo de hacer, aún así mi respuesta es no, es demasiado obvio que se aman, pero no puedo dejar que un impuro se mezcle con la pureza – Victoria… ¿Estás segura que sólo es eso? Nosotros somos pareja, ellos saben que yo no soy puro, igual así me amas, por lo que sé – agrega Maahi y luego habla Adrian – puedo percibir que ustedes son el uno para el otro, ese es mi don, y yo lo vi en cuanto dije sí de cuidar a Elizabeth – ¿Enserio? – dice Victoria – entonces cambio mi voto, sí – ¿Maahi? – le pregunto – sí, ¿Se quieren casar ahora mismo? – sí – digo “¿No quieres esperar a una ceremonia?” – no querido, por favor, cásanos ahora – bueno si eso es lo que desean – anuncia Maahi – considerando que soy la ley, haré yo la ceremonia, estamos aquí reunidos para unir esta pareja en santo matrimonio, sólo que este matrimonio es un matrimonio sin fin, porque es eterno, matrimonio vampírico – le tomo la mano a Adrian, lo notaba muy nervioso “Te amo” yo también, es tan lindo, hasta en su mente me dice eso, me quedé divagando y justo regresé en la parte – Elizabeth, ¿Aceptas a Adrian, como tu futuro esposo? ¿En las buenas y en las malas? – acepto – Adrian, ¿Aceptas a Elizabeth, como tu futura esposa? ¿En las buenas y en las malas? – acepto – “¿Juntos por siempre?” – por siempre, y más – ahora puedes morder a la novia, como la novia puede morderte – me asusto “Tranquila querida, nosotros al hacer eso nos pasamos todas nuestras memorias, es como el ahora puede besar a la novia, pero debe ser en el labio”, me mordió, no me dolió, lo mordí a él, le dio cosquillas – bueno, supongo que se quedarán más tiempo – anuncia Arturo - ¿Serías tan linda de quedarte un tiempo para tratar de copiar tus poderes? – me dice Arturo muy entusiasta – lo siento Arturo – dice Adrian – nos esperan en nuestro hogar, además Elisa debe alimentar a Nícolas - ¿Quién es Nícolas? – pregunta Anastasia – Es un Puma, es mi mascota, lo iba a matar pero le absorbí lo suficiente, y lo sané y jugamos toda una tarde, y decidí adoptarlo – le digo – que belleza, ¡Quiero jugar con Nícolas! – dice Anastasia – Pero ustedes nunca tendrán negada su visita en nuestro hogar, a excepción de Isabel, supongo que comprenderán que no quiero que nada le pase a Elisa – Dice Adrian “sí entiendo” dijeron todos al unísono “Te odio maldita, puede que no esté bienvenida, pero igual algún día te mataré” – pruébame – la desafío – no te metas conmigo, mal nacida – si tan mal nacida que te detuve en un dos por tres – se queda callada incluso en sus pensamientos – Arturo me encantaría quedarme, pero llevo ocho años sin ver a mis padres, quiero pasar más tiempo con ellos – bueno lindura, de vez en cuando los iré a ver, ¿Siguen viviendo en chi cago? – se ríe por la separación que hizo – no, vivimos en Chicago – aha, te diste cuenta – sí, bueno procedemos a irnos – los extrañaremos – dice anastasia “Yo por ningún motivo” – nosotros igual – digo con adrian al unísono, nos fuimos, rápidamente, pero más lento que la primera vez, pero fue suficiente para que nadie nos viera, volvimos al bosque – estoy tan feliz – le digo y lo abrazo, nos empezamos a besar “Yo igual”, tenía su mano en mi cintura, comenzó a bajar, ahora no me incomodó para nada – no creo que sea el lugar indicado – si quieres hacerlo en otro lado – me siguió besando, se notaba que esperaba mucho este momento - ¿Tu quieres aquí? – yo quiero lo que tú quieras – se detiene – prefiero que sea especial – da un suspiro de reproche – bueno, busquemos un lugar especial – seguimos caminando, encontramos una cabaña demasiado linda, entramos a echar un vistazo – es hermosa – dijo Adrian, tenía velas, y una cama muy grande, “Este lugar es perfecto ¿no crees?” – sí – nos empezamos a besar de nuevo, Adrian se sacó su camisa, era la primera vez que lo veía sin camisa, es muy lindo, me besaba, no me soltaba, como si fuese su más preciado tesoro, no me molestaba en lo absoluto, luego lentamente, empieza a sacarme el vestido, me puse algo nerviosa, era demasiado especial, todo, desde cómo me besaba hasta cómo me acariciaba, me tomó en brazos, y me recostó en la cama, qué no me besó, luego tuve la mejor experiencia de mi vida, algo único, pero, nos estaban esperando, y ya habíamos terminado, nos vestimos, y fuimos donde ellos estaban – llegamos anunciamos – vieron nuestros labios, eso eran como los anillos de matrimonio - ¿¡Si los dejaron casarse!? – sí Joseph – le digo – te felicito hija mía – mi mamá me abraza – cuidadito que los pille en algo a ustedes dos – dice Marco a Adrian - ¿Acaso estas celoso padre? – no – dice “Celoso yo, ¡Rayos!, aún no me acostumbro a que puedas leer mi mente” – papá, estás loco – por eso soy tu padre – sí – lo abrazo …

1er Capítulo

Corre Elizabeth
Íbamos corriendo, mejor dicho, el corría, me llevaba en sus brazos - ¿Qué hacemos? ¿Por qué corremos? ¿Qué peligra? – sh… nos van a oír – me asustó, es raro escuchar que alguien nos iba a oír si no había nadie alrededor - ¿Hazme un favor? - mi prometido anuncia, muy asustado – dime, lo que sea – lucha por tu vida, así sea que me tengas que matar para ello - ¿¡Qué!?, ¿¡Estás loco!? – no, si sigo luchando, es por tu vida, es lo único que importa ahora – me besa, hace tiempo que no me besaba, ahora lo besé yo - ¿Qué pasa?, dime – ellos vienen, descubrieron que tú eras el ser que ellos buscaban - ¿Ser? – sí, nunca te has preguntado ¿por qué no recuerdas tu vida antes de los diez años? O ¿Por qué un ser endemoniado estaba con el deber de cuidarte?, es porque eres una gema, Elizabeth, la gente nace predestinada, el uno al otro, yo perfectamente te pude haber comido, pero te amo, estamos predestinados, ese es mi don, ver quién es para quién - ¿¡Comer!?, ¿Gema?, ¿Predestinados?, o sea yo siempre pensé que somos el uno para el otro, pero – cállate, nos escuchan – murmura, miraba alrededor pero, no había nadie, ¿Quién nos escuchaba?, ¿Por qué soy una gema?, todo era demasiado confuso para mí – lo siento – dice él - ¿Por qué? – me muerde, lo hizo con dolor, lo pude sentir, como entraba lentamente esos colmillos en mi cuello, era demasiado lento, pero sin dolor, sentía como una sustancia pasaba por mi cuello, eso sí dolía, como la penicilina, pero diez mil veces más dolorosa y notoria, perdí conocimiento, sólo sabía que dolía, y que por eso mi amado se disculpaba, no sé que me pasaba, tampoco por qué se llamó demonio, ¿Qué me ocultaba?, además corría demasiado rápido, como para ser un movimiento humano, ¿Un demonio? ¿Con apariencia humana?, es raro, mejor dicho, diferente, siempre he amado lo diferente, pero por primera vez tengo miedo, miedo a lo desconocido, nunca pensé que Adrian me haría daño y me daría miedo, aún lo amo, debe tener una muy buena justificación para lo que hizo, yo lo conozco, y el primero muerto antes de dañarme, no puedo pensar en nada más, todo lo demás queda en el olvido, ¿Qué dejé en el olvido?, ¿Qué es olvido?, ¿Quiero a alguien más que Adrian?, preguntas, pero sin respuesta, no siento que respiro, ni si quiera donde estoy, como si estuviese sumergida, en un solemne mar, sumergida en lo más profundo, esa penicilina desapareció, ¿Sigue pasando por mi cuerpo?, porque ya no duele, ¿Dónde estás?, quiero abrazarte, ¿Dónde? – ¿Elizabeth? – ¿Adrian? – noto un suspiro de reproche - ¿Quién es adrian? – abro los ojos, no era él - ¿Quién eres tú? – soy Joseph, soy tu tío - ¿¡Tío!?, mi tío, Hernán murió, según los demás cuando tenía cinco años – bueno eso era para quitar sospechas, y de vez en cuando debo cambiar de nombre, soy inmortal, Elisa, al igual que tu – pongo los ojos como platos, horrorizada, ¿Inmortal? Y ¿Adrian?, salto y corro por los alrededores para buscarlo - ¡Adrian! – seguía corriendo, pero no me cansé, yo era pésima corriendo, y corría más rápido de lo que corrió Adrian - ¡Elizabeth! – dice Joseph – pude calcular fácilmente por su voz que tan lejos estaba, cinco kilómetros, cuatro metros y un centímetro y medio, pero en un segundo estuvo al lado mío - ¿Quién es Adrian? – Mi novio, alto, de gran atractivo, ojos verdes, pelo negro – ese… - dice con cara de espasmo, me sentí mal, porque notaba que Joseph era familia, teníamos un muy buen parecido, y sentía que ya lo conocía, me quedo mirando a la nada, me vino una especie de flash back, de cuando él me llevaba a jugar, a este mismo bosque, está igual que ahora, no ha envejecido ni una pisca, juraría que lleva la misma ropa – Joseph… ¿Siempre has sido vampiro? – me mira asustado, era como casi algo obvio para él, de repente me llegan más recuerdos de esos juegos en el bosque, los dos, nos dedicábamos a cazar – según tu cara, sí - ¿Acaso tu no? - ¿¡Yo!?, a mi me acaba de convertir Adrian, dijo algo de que yo era una clase de gema – espera espera, ¿Él te convirtió?, pero – ríe – tu naciste siendo vampira, tontilla, solíamos cazar en el bosque, ¿No te acuerdas? – la verdad es que perdí la memoria a los diez años, y para ser franca, nunca he tenido algún favoritismo por la sangre, de hecho la odio, mejor dicho la odiaba – hay niña, hay tanto por explicar, no sé quién lo habrá hecho, ¿Tus padres?, ¿Marcela y Marco? – No los veo desde que perdí la memoria – ya veo, te explico, tus padres, al igual que yo, tenemos demasiados enemigos - ¿¡Por qué!? - porque somos muy pocos vampiros que llevan su vida junto con la gente teniendo el autocontrol necesario, hay algunos que ni se pueden acercar a un pueblo, debido a que lo destrozarían en un minuto, si es que no es menos, a decir verdad – ríe – el más perezoso de los vampiros se demoraría un minuto – me asusto, ¿Sería capaz de matar a la gente? – bueno, nosotros teníamos dinero para sostenernos quince vidas seguidas, llenos de lujos, pero decidimos, tratar de ser humildes, ya que no queríamos levantar sospechas, pero igual trabajábamos, yo era obrero, tu padre era médico, y tu madre enfermera, ellos dos tenían un consultorio, a tu madre le daba rabia como estaban catalogadas las enfermeras, decían que eran las putas gratis de los médicos, ella nunca dejó, por eso mismo, que tu padre besara a tu madre mientras trabajaban – ríe – tu padre llegaba a la casa diciéndome “Tu hermana no me deja besarla” y tu madre decía “Sabes que acá me puedes besar y más si quieres, pero en el consultorio sabes que no” – hacía una voz rara a mi madre, como típico hermano menor que se jacta de su hermana, reí un poco - Creo que me desvíe un poco - la verdad, sí, pero no importa, eran cosas que no sabía de ellos, y que me hace feliz saberlo – bueno prosigo – por favor – sonrío – bueno, éramos unos de los pocos vampiros, que eran felices, y al lado de los humanos, trataron muchas veces de matarte, les querían dar donde más duele, un ser querido, por eso yo decidí irme, para que me busquen lejos de ti, pero cuando tenías cinco años hablé con tus padres y que tenían que hacer lo mismo, pero solo alejarse no iba a ser suficiente, ellos pueden ver tus recuerdos a través de tus ojos, si es que no sabes protegerlos, y una niña nunca podría, ellos estuvieron de acuerdo, acudieron a Mateo un amigo de la familia, el no nació siendo vampiro, él era hechicero, y pidió con todo su ser, ser uno de nosotros, y tenía más poderes siendo vampiro, le pedimos que te adormecieran la parte vampírica junto con tu memoria – o sea que… ¿Siempre lo he sido? – sí, y el odio a la sangre era normal, tu cerebro fue programado para alejarte de todo eso, además cuando al final nos fuimos todos, Alejandro quedó bajo tu cuidado, era atractivo de pelo negro y ojos vedes, y muy alto – espera, ¿No será Adrian? El tiene un poder, de ver quién es el uno para el otro – al parecer se cambió el nombre – Joseph, yo lo amo – no te preocupes, sabíamos que pasaría, y con mayor razón si él te cuidó, es un buen vampiro - pero… ¿Por qué se llamó Demonio? – Mira Elisa, él no nació como vampiro, a él lo convirtió una vampira, que lo odiaba, y ella sabía que era el ser que más detestaba, y cuando lo convirtieron, mató a toda su familia, por un poco de sangre – um… ¿Dónde se fue? – viene enseguida, le dije que esperaríamos - ¿Por qué me llamó gema? – porque algunos vampiros tienen dones, y tú no tenías solo un don, tenías cinco, cosa que si te desviabas, serías un daño - ¿Cuáles son esos? – uno era curación, ya sea a un vampiro o un humano, el segundo, era seducción a vampiros y humanos, pero como eras pequeña no te interesaba utilizarlo, el tercero, era la manipulación de chacra, el cuarto, ver enfermedades y el quinto era tu asombrosa capacidad de mover las cosas con la mente, telequinesis, cuando te enojabas debíamos salir corriendo – ríe a carcajadas, no pude evitar sonrojarme, fue como una indirecta de “Cuando eras pequeña eras un peligro para la sociedad” – lo siento – no importa, era divertido, verte con tus mejillas sonrojadas, solo faltaba el humo salir por tus orejas, bueno tu eres un espécimen muy extraño – Joseph, ¿Mis padres están muertos? – sentí como una bola de fuego pasaba por cada vibra de mi cuerpo – no lo sé, Elizabeth – se escuchan unos murmullos, me asusto y sin darme cuenta tiré algo, que los dejó al descubierto, eran Adrian y mis padres – Elisa, no lo vuelvas a hacer – Marco, recién re empieza su vida vampírica, no fue su intención tirarnos una carga de chacra – ¡Mamá! – abrazo a los dos, veo a adrian, brinco en sus brazos y lo beso – Joseph me contó todo ¿Te costó mucho mantenerlo sólo para ti? – Adrián mira a Joseph, y se ríe a carcajadas - ¡Que nombre más ridículo te pusiste! – ¿ah?, ¿Si?, Adrian – los dos empiezan a molestarse – mamá ¿Se llevan muy mal? – mi mamá suspira – sí – me causa gracia – me pongo seria - adrian, basta – le pido de buena manera, pero no me hace caso, y pensé en el poder de seducción que tenía, si activé tan rápido el del chacra este me costará menos – Adrian – me acerco lo más seductora que puedo – ven – mi mamá entiende lo que hago, pero los demás no, de repente veo la cara de Adrian abobada y fue como un bien interno, sabía que lo tenía comiendo de la palma de mi mano, pero veo que ya no me mira así, y me pienso a sentir mal, me dolía, ¿La garganta? O ¿El estómago?, me arrodillé y puse mis manos entrelazadas alrededor de mi abdomen – ¿Elisa? – mira Adrian confuso - ¿Por qué me duele el estómago? – dije entrecortado, casi tirada en el suelo – si eres una dulzura – me abraza Adrian y me da un beso y me avergüenzo - tienes hambre – dice Joseph, me estremecí, nunca había tenido hambre en mi vida, y con haberme convertido pensé que nunca lo tendría – pero… ¿No es que los vampiros no comen? – escucho una carcajada generalizada, me enojé, me sentí idiota escucho a todos gritarme ¡Tranquila! - ¿Qué pasa? – veo a mi alrededor, había destruido seis árboles con la mente, me asusté y me dije que era un peligro para la sociedad, llevé mis manos a mi cara, quise llorar, pero no salían lágrimas, adrian me abrazó – Elisa… ¿Vamos a buscar algo de comer? – quiero un burrito – le dije al oído, temiendo decir alguna otra estupidez, me abrazó – vamos, te explicaré en el camino – me levanté y caminamos – Elisa, nosotros no comemos comida, podemos, pero eso no sacia, debemos comer, mejor dicho, tomar sangre - ¿Cómo eso?, que extraño, pero creo que me será fácil acostumbrarme – beso a Adrian, lo amo demasiado, es una de las mejores cosas me ha pasado, lo amo, y quiero pasar toda mi vida con él, me aferro mucho a él, y escucho un gemido - ¿Qué pasa? – le pregunto – al ser nueva en esto, estás desestabilizada y tu fuerza, es demasiado grande, tomará un par de horas más que se estabilice – disculpa – le doy la mano, pero con un movimiento muy veloz, aunque pude divisarlo, me envolvió en sus brazos, y me besó – te amo – me dijo sin soltarme – yo también – nos pusimos demasiado melosos, pero no me molestaba, de repente siento que la mano de Adrian baja mucho, me alejo de él - ¿Qué pasa? – nada, es sólo que me da nervio - ¿Qué cosa? – que bajes tanto la mano, lo siento, no estoy acostumbrada – me apoyo en su pecho, como si quisiese esconderme en su pecho – no te preocupes mi vida, ya llegará el momento – es que no, yo sí quiero ¿Tratemos de nuevo? – Elisa, no te quiero forzar –no lo haces, yo de verdad… quiero – empiezo a utilizar el poder de seducción, el ya entendió lo que significa – no es justo –me abraza y me besa – déjate llevar – estábamos besándonos, bajó la mano, di un pequeño brinco, sentí que iba a sacar la mano, le tome la mano y se la dejé ahí – déjame acostumbrarme – lo abrazo, un poco más fuerte, pero midiendo mi fuerza, no quería hacerle doler – te amo, nunca te olvides – juntos por siempre – le respondo, sobre todo ahora que viviremos por siempre, me seguía protegiendo en sus brazos, se sentía tan bien, ahora había comprendido porque nunca intentó hacerlo, humano y vampiro, pude haber salido lastimada, pero ahora no se negaba, era una sensación rara, pero exquisita - ¿Elisa? – me dice sin dejar de abrazarme, llevo me cabeza a su pecho - ¿Dime? – nunca te vayas de mi lado – me abraza más fuerte, no me molestó – eres lo más importante en mi vida y si te pasa algo no podré vivir tranquilo – me besa – Adrian eso no va a pasar, no soy tan tonta como para enamorarme de otro, si tu eres a quien quiero – si eres tonta – me alejo un poco de él, pero lo suficiente para que deje sus manos en mi cintura - ¿Cómo eso? ¿Soy tonta por enamorarme de ti? Siendo que tú dijiste que podías ver que estábamos predestinados – Elisa, no digo que lo haya hecho pero la gente puede mentir – de repente escucho “te amo”, era el mismo tono de él, pero él no gesticuló ni una palabra “Eres lo más importante en mi vida, aún no entiendo por qué te enamoraste de mi, soy un demonio, maté a toda mi familia” – sí me contó Joseph que mataste a tu familia pero eras un novato, si hubiese habido algún humano a mi alrededor … - ¿a qué viene tu comentario? – quedó plasmada, verdad que él no sabía que descubrí un sexto “Don”, “¿Qué se trae entre manos?, justo encajo con mis pensamientos” – si encajé con tu pensamientos, es porque creo que los escucho, acabaste preguntarte que traía entre manos, ¿cierto?, bueno, no me traigo nada – o sea que ¿Ahora tienes un sexto don? – así parece, pero me he dado cuenta que casi todos son mentales – “Que envida, yo sólo tengo uno que no sirve de nada, nada importante, ella podría matar fácilmente a un ejército de vampiros, ojalá aprenda rápido a usarlos todos al mismo tiempo” – ¿Puedo?, sería algo peligroso – no si aprendes a usarlos – empezamos a caminar de la mano me volvió el dolor al estómago, se me había olvidado que tenía “hambre” hice un gesto de molestia “De seguro tienes hambre, a mí se me olvidó lo siento ahora vamos a ver que encontramos” – por favor – “Pero si eres una lindura, yo soy nadie, y tú te dignas a estar con alguien como yo, un impuro” - ¿Sabes? Nunca me había dado cuenta de tu pésima autoestima – trato de disimularlo, pero con tu tío se me es algo difícil – huelo algo, algo ardiente, llevo mis manos a mi garganta, sentí cómo hacía una especie de metamorfosis, sentía como crecían mis colmillos, entendí que era el tiempo de caza, “Hay una presa cerca, ve a comer” – Corrí demasiado rápido, en busca de mi caza “Impresionante, corres más rápido que yo, esa es mi chica” de repente, veo a un puma, el puma tenía miedo, entendía que yo no era humana, vi en sus ojos, como ya sabía que moriría, no podía, me acerqué a él, se arrinconó en una cueva, le ofrecí mi mano, para hacerle cariño “¿¡Pero qué haces!?, mátalo de una buena vez” miré al puma, ya se había encariñado conmigo, no podía, pero pensé, tengo el poder de curación, ¿cierto?, lo mordí, absorbí lo suficiente, para mantenerlo con vida, escuché como su corazón se iba apagando, y me miraba, quería ayuda, rápidamente, puse mi mano en su herida, y lo empecé a sanar, y sentí y escuché como su respiración y latir volvía a su normalidad, los colmillos desaparecieron, me miró con miedo, pero con gratitud, lo abracé “¿Por qué lo dejas con vida? Es un simple puma” – me da pena, ¿Okay? – “Okay lo siento, es típico de una principiante” no le di importancia a su comentario, empecé a jugar con el puma, es tan bello, como mueve su cola juguetona, y brinca en sima mío, y sé que no moriré jugando, me mordía pero no lo sentía, tenía mi piel suave, pero durísima “Amor, no juegues con tu comida” – no te metas, el ya no es mi comida, y se llama Nícolas – no querrás decir ¿Nicolás? – no, Nícolas, ¡Nícolas! Vamos a jugar – estuvimos horas jugando, el ya era parte de mía, fuimos a donde los demás, con Nícolas, ya sabía que me iba mantener de su sangre – hemos llegado – anuncio “Si y jugó todo el rato con su comida” dice Adrian “¿Nos trajo comida?, que considerada, pero no tengo hambre” dice Joseph, “¿Qué hace con un puma? ¿No era que fue a comer?” Dicen mis padres al unísono – de partida, para todos, Nícolas es mi nueva mascota – “¿¡Qué!? ¡Está loca!” dicen todos menos Adrian, que él ya se conformó, y por lo que vi tampoco le extrañaba mi decisión – punto uno – Joseph, no te traje comida, y mejor que no tengas hambre; Adrian, Nícolas no es mi comida; Marcela y Marco, sí fui a comer, me alimenté de él y usé curación, y no, no estoy loca, y si sé todo lo que les acabo de responder, es porque tengo un sexto don, leer mentes – “Mi hija es la mejor, seis dones en una vampira, quién lo habrá imaginado”, dice Marcela, “Aún no entiendo como puede andar con Leandro”, dice Joseph – Joseph, lo amo, y yo no me fijo en lo que tiene, sino en cómo es, podrá haber sido humano, pero te recuerdo que yo también lo fui, por ocho largos años – pero eso es diferente – replica Joseph – sabes que no lo es – agrega Adrian – mamá, me quiero casar con Adrian ¿Hay que hacer algo especial? – “Amor ¿Estás segura? No es que tenga miedo y menos que no quiera, pero acá no existe divorcio” dice Adrian preocupado – Adrian yo no me voy a divorciar de ti – Tienes que hablar con la “Camarilla” querida, pero no creo que aprueben su relación debido a que Adrian es – le duele decirlo – impuro – prosigue – vamos enseguida con la camarilla, deben entender, yo lo amo, y puede ser “impuro” cual término odio, pero él es especial, él me cuido cuando no debía, el los reemplazó a ustedes – “Pero no fue porque nosotros quisiéramos, también entiéndenos, si no hubiera sido por eso, quizás ahora estarías muerta ” – mamá no me importa, igual, esa es la verdad, y así me sentí estos años, vamos donde la camarilla, ¿Dónde queda? – le tomo la mano a Adrian en modo de esperanza, pero vi cómo mató a su familia, me di cuenta que en mi lectura de mente, si piensa en un recuerdo o piensa en una imagen y o video, con solo tocarlos, puedo divisarlo – Amor, fue muy violento… pero eso quedó en el pasado – es que tu no viste – lo acabo de ver, al tomarte la mano, debo admitir que es escalofriante, pero déjalo en el pasado – lo beso “Eres espectacular, no entiendo cómo me amas, eres única” – tu también amor – gracias – seguimos tomados de la mano – y díganme ¿Cuál es el conducto regular a seguir? – todos me miran con cara de confusión – con respecto a la camarilla – “Ah, a eso te referías” dijeron todos menos Adrian que estaba sumido en sus recuerdos, mientras yo veía, me mostraba cómo él me amaba, desde que me conocía, y que tenía que hacerlo secreto para no asustarme, cuanto le costaba ocultarme su vida, me dolía – La Camarilla – comienza Joseph – es la junta de los vampiros, es como tribunal de justicia, pero ellos, además hacen la ley, por eso son muy precavidos en ingresar a alguien en el grupo, y si alguno de ellos desea abandonar la camarilla, es una muerte segura – trago saliva, ahora veo porque lo decían tan asustados – esta camarilla, sentencia de la peor manera, ellos investigan tu vida, con los dones que poseen, y le dan donde más duele, por eso uno ve que no hay tantos crímenes vampíricos, si deseas morir, ellos te cuidarán, para que no mueras, ese sería el castigos de quienes ansían la muerte, ellos al igual que nosotros, son muy odiados, porque consiste, de cinco personajes, que llevan su vida a cabo como cualquier humano al igual que nosotros, mira pásame tu mano, trataré de visualizarlos – nos damos las manos, veo puras sombras – ¿No tienes sus caras? – no, muy pocos los han visto cara a cara, yo los vi en un cuarto oscuro, como vez en la imagen la de la izquierda es Isabel, tiene el mismo don que estás utilizando ahora, ver recuerdos, así es como determinan la sentencia, el segundo es Tomás, su poder, es ver cuando mientes, y si te descubre, él sabrá la verdad de inmediato, el de al medio es Maahi, él sólo se dedica a hacer las leyes, el es el único impuro de ellos, nadie sabe más que nosotros, así que no lo comentes, el cuarto es Arturo, su poder, es copiar los poderes de los demás, pero él nunca pudo copiar los tuyos, le resultaba fascinante, no sabíamos si eso era un Don o una capacidad, pero él te estima mucho, es el que más corazón tiene, junto a su pareja Anastasia – ¿Anastasia? ¿Cómo los romanof? – es ella, su poder es ver el futuro ella es la quinta de la camarilla, siempre debes tener cuidado con Isabel, si le caes mal, date por muerta, es escalofriante, por un tiempo me odiaba, debido a que yo le gustaba pero nunca quise nada con ella, hasta que conoció a Tomás y se le pasó los caprichos conmigo, aunque debo admitir que es una persona muy codiciada por todos los vampiros, es hermosa, todos dicen que es Afrodita, yo no lo creo tan así, la encuentro bella, pero no me dejaría llevar por la hermosura – “La camarilla, debes tener cuidado si quieres que nos casemos, debes ser respetuosa, y nunca mirar a los ojos, sobre todo de Isabel, es cierto lo que dice Hernán, mejor dicho Joseph, ella es realmente escalofriante, tiene una cara seductora y diabólica a la vez” me dice Adrian preocupado - ¿Dónde los encuentro? – “A pesar de todo lo que dije ¿Aún quieres ir?” – sí, aún quiero, díganme donde los encuentro, Adrian pero si tendrás que venir conmigo – por supuesto querida – me besa “Aunque debo admitir que me da escalofríos ver a Isabel” – ya veremos que hacemos – empezamos a caminar Adrian sabía el camino, les pedí a los demás que cuidaran de Nícolas, estaba ya dormido, es una dulzura, “Es primera vez que estoy tan nervioso” – Cálmate – le dije mientras tomaba su brazo y lo pasaba por mi cintura – es que, no sé, lo que estoy seguro que las reglas son muy exigentes, y que si no estamos casados, no podemos tener relaciones – me sonrojo - ¿Enserio? – sí – bueno entonces hagamos nuestro mejor esfuerzo – “¿Que… acaso quieres hacerlo? haha” – bueno entonces no vayamos – “no vamos mejor”, le sonrío y lo beso – eres el mejor – bueno mejor corramos, así llegamos más rápido, empezamos a correr, llegamos en una hora, estábamos en Chicago – Estados Unidos y llegamos a Hiroshima – Japón - ¿Qué hacemos acá? – “Acá es”.